Consejos para no quedarte atascado en un obstáculo
Desafío de Guerreros es una aventura. Y es que, las carreras de obstáculos son un poco como la vida misma. Al final, tenemos que mirar adelante y superar los obstáculos que se nos plantean para conseguir llegar a la meta. Para ello tenemos que tener resistencia tanto física como metal, capacidad de esfuerzo y persistencia para intentarlo las veces que haga falta. Pero también sentido del humor, capacidad de salir de la zona de confort y compañerismo cuando sea necesario. Siempre habrá algún obstáculo que se nos haga más difícil que otro, pero créenos Guerrer@ si te decimos que eres capaz de llegar a la meta.
Participar en Desafío de Guerreros exige un cierto grado de preparación
Las carreras de obstáculos como Desafío de Guerreros nos ayudan a vivir la emoción de practicar el deporte en equipo. Al inscribirte en una carrera tendrás una fecha y una motivación para entrenar y prepararte. Tu entrenamiento ha de ser variado, pues son muchos y diferentes los obstáculos con los que te puedes encontrar. En cualquier caso, debes tener presente, que al igual que ocurre en la vida, muchas veces es más importante la maña (y la tenacidad) que la fuerza. Prepárate para la gloria, es decir, para sentirte orgulloso de haber superado la prueba.
Los obstáculos de Desafío de Guerreros requieren un cierto grado de preparación física para superarlos. Entre las habilidades que debes tener están la fuerza, la destreza y el equilibrio. En su origen, las OCR (Obstacle Course Race) surgieron como entrenamiento militar para los ejércitos de diferentes partes del mundo. A día de hoy, se han convertido en una forma de entretenimiento y competición para los aficionados al deporte.
Aunque en cada carrera de este tipo las pruebas y obstáculos son diferentes. Por ejemplo, en Desafío de Guerreros hemos creado unos obstáculos exclusivos a los que hemos dotado de nombres propios. Suelen basarse en el mismo tipo de obstáculos originales. Se trata de obstáculos que tienen que implicar un esfuerzo deportivo pero con un grado de diversión.
Algunos tipos de obstáculos que puedes encontrar
- Los muros. Nos referimos a paredes verticales que tienes que escalar, el problema es que suelen medir más de dos metros o tener inclinaciones complicadas. A veces son paredes lisas, lo que, especialmente si estás manchado de barro, suele ser un problema. Para superarlos es importante que cojas impulso y que tengas las manos preparadas para agarrarte. Procura hacer la caída con los pies por delante.
- La cuerda es uno de los obstáculos más clásicos. Se trata de obligarte a trepar por una cuerda vertical. Sí, aquí te habrá venido muy bien entrenar. Lo ideal es intentarlo con las manos secas y mejor con guantes. Además trata de impulsarte con las piernas.
- Los troncos son otro clásico. En este caso es una prueba de equilibrio, hay que avanzar por encima del tronco sin caerse. Es mejor hacerlo con pasos cortos y a buen ritmo sin mirar al suelo.
- Las barras monkey, son esas barras paralelas por las que tienes que avanzar sin tocar el suelo. Sí, como si fuésemos monos avanzando por las ramas. Aquí también es importante usar guantes y tener las manos lo más secas posible. Para avanzar lo mejor es balancear el cuerpo y aprovechar el impulso para ir avanzando por las barras. Entrenar la técnica no te vendrá nada mal.
- La red, una red de cuerda puede utilizarse de diferentes maneras para dar forma a un obstáculo. Puedes tener que escalarla o que arrastrarte por el suelo para tener que pasar por debajo. En cualquier caso funciona como una especie de tela de araña y debes evitar que te atrape.
Desde Desafío de Guerreros te aconsejamos afrontar cada obstáculo como un pequeño paso hacia la meta. Si alguno se te resiste, toma aire antes de intentarlo de nuevo. A veces reírse de uno mismo ayuda. Y, pedir ayuda a un miembro de tu equipo también.